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viernes, noviembre 12, 2010

Hermione habla de música

Hermione Granger, la brillante aprendiz de hechicera, es mi personaje favorito de la saga fantástica de Harry Potter. Considero que es un excelente ejemplo a seguir para la juventud: una niña intelectual, que utiliza el razonamiento lógico, con poderes para cambiar al mundo, los cuales adquiere producto de su esfuerzo, leal, honesta, le fascinan los libros, protege a los desfavorecidos y ama a los animales, ¿qué más se puede pedir como modelo en esta época? Por ello, creo que le queda grande al grisáceo Ron como novia y esposa, desde mi punto de vista J. K. Rawling se equivocó en este punto, en el cual el mismo relato en ocasiones apuntaba a Hermione como la pareja ideal de Harry.

A punto de ser estrenada la penúltima película de la historia, Patricia Gosálvez presenta en El País una pequeña entrevista hecha a Emma Watson, la intérprete de Hermione, y que actualmente estudia en la Universidad de Brown, en la cual habla sobre el impacto del referido papel en su vida, su lectura de la generación a la cual pertenece y sobre sus gustos musicales, entre otras cosas.

Al parecer Watson comparte la agudeza intelectual de su personaje y somete a critica a la generación a la cual pertenece (ella nació en 1990): "Estamos un poco perdidos, no tenemos nada contra lo que rebelarnos, somos demasiado libres y entre tanto que elegir nos pasamos el tiempo dilucidando el camino correcto." Pareciera describir a un grupo de jóvenes mimados, conformistas y confusos que aún no se han enfrentado a algún desafío generacional que los haya estimulado para sacar lo mejor que tienen por ofrecer.

Su sofisticación la lleva a menospreciar la música actual: "... hay demasiadas canciones sobre cómo conseguir una mamada y tonterías por el estilo." En efecto, Watson parece no conformarse con los ritmos repetitivos y simpleza creativa que a veces se impone comercialmente, exije un minimo de relevancia en el mensaje: "Si miras las letras de las listas de éxito ¡son ridículas! No sé, mi padre es mi gran influencia musical." Lo anterior lo afirma con convicción a pesar de que reconoce, con cierta pena, que no es normal que un joven aprecie la música que le gusta a sus padres.

Lo anterior la lleva a citar entre sus favoritos a algunos músicos que comenzaron a incursionar en el negocio en los años setenta, entre los que menciona a Van Morrison,  Tom Petty, así como a una cantante poseedora en mi opinión de una de las voces de tono medio más suaves y distintivas: "¡Lo sé! Es que yo, simplemente, no tengo una vena rebelde. Es agradable escuchar a Joni Mitchell con mi padre. Estás pensando que soy una ñoña, ¿verdad?" Pues no, apreciada Emma, no eres una ñoña, simplemente tu buen gusto te orilla a saber apreciar la buena música, independientemente de su época.

Lo anterior sirve de excusa para anexar un video de la mencionada Joni Mitchell, en la cual interpreta, guitarra en mano (rara avis entre las vocalistas contemporáneas), su creación que más me gusta: Help me, la cual escribió por allá en 1973-1974, inspirada, según cuenta la leyenda, en Glenn Frey, vocalista de The Eagles, que apenas comenzaban a hacer esfuerzos por abrirse camino a la relevancia artística. Sin menoscabo de que considero obligado contar con la versión de estudio de la canción en cualquier audioteca que se respete, la del video presenta la singularidad de dar una mayor relevancia al saxofón, en suplencia de los coros femeninos originales, lo que aunado al ambiente propio de una presentación en directo, proporciona a la interpretación un exquisito toque "jazzístico".

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